jueves, 10 de mayo de 2012

CABRILENCA 2012

El día “D” ya ha pasado, como podréis apreciar por las fechas en las  que estamos. La Monegros 29er 2012 ya es historia. Os puedo adelantar que no fue lo esperado, que estoy algo decepcionado con mis prestaciones y por la Organización del evento, pero esto lo hablaremos en otro momento. Antes de explicar mi aventura en el desierto, os debo la crónica de la pedalada de Cabrils, más conocida como la “cabrilenca” o como yo le llamo, la “cabronenca”, ya veréis por qué lo digo…





Nos habíamos citado en Cabrils 3 bikers para afrontar esta cita clásica en el calendario btt catalán. Ya son 18 años los que se viene realizando esta marcha y la organización es exquisita. Todo muy ordenado, los bikers nos sentimos bien atendidos y no faltó de nada. Felicitar a la secció ciclista “La Concordia” por el trabajo realizado y a los voluntarios que hicieron posible esta bonita pedalada.

El lugar de encuentro fue la riera de Cabrils, a las 8h. Con mi gran amigo Antuán, Axel y un servidor, pero Axel avisó que se retrasaría y esto ponía en peligro la retirada de su dorsal y la participación en la prueba. Gracias a la tecnología, me envío una foto de su DNI y pudimos recoger su bolsa de bienvenida. En ella se encontraba una pulsera para poder acceder a los avituallamientos, el dorsal, un gel y el chip que nos daría el tiempo personal de cada uno. Saludos, montamos las bicis, nos preparamos los bidones y como siempre…se nos hizo tarde y salimos en la cola del pelotón (es una forma ya clásica de empezar las pedaladas).



Salimos desde una riera y empezamos a subir por una carretera estrecha, mal asfaltada y deteriorada por el poco mantenimiento recibido. Es la famosa “subida a la Mutua Metalúrgica” Subida que nos lleva a las antiguas instalaciones de una Mutua de accidentes de trabajo donde se realizaban terapias de rehabilitación. Pero no es famosa por eso, sino porque los primeros bikers en coronar (en categoría masculina y femenina) se llevan un jamón!!!!  Pero con la condición para llevarse semejante premio es la de completar el recorrido largo (40 Km).



Las vistas desde la carretera son espectaculares, podemos ver el mar y el pueblo a nuestros pies, disfrutando de un día que amaneció espectacular y radiante, tras una noche de lluvias. Coronamos y se abre una pista bastante ancha de bajada, rápida para luego remontar un poco y llegamos a un punto donde se separan los 2 recorridos (largo y corto). Aquí empieza lo bueno, empezamos a disfrutar de los muchos “corriols” que esta marcha nos obsequiaría, en este caso de bajada, pero con los esperados y habituales embotellamientos del principio, debido a alguna dificultad técnica, algún árbol caído o múltiples charcos que dificultaban el paso.


 
Tras la bajada, llegamos a una urbanización y emprendemos una subida de asfalto bastante pronunciada, que nos llevaría a otro senderito en constante subida y algo embarrado. De repente se abre el cielo, los árboles que nos cobijan desaparecen y tenemos una bajada técnica de losas bastante resbaladizas, que tras sortearlas nos llevan de nuevo a otra subida bastante ancha sin dificultad alguna.



Km 16. Aquí tenemos el primer avituallamiento del día y me reencuentro con mis compañeros de salida. Tras comer algo y llenar el depósito del Camelbak emprendemos la marcha en grupo. Una bajada pronunciada y una raíz casi dan con mi cuerpo en el suelo, pero pude echar pie a tierra a tiempo. Empezamos un sube-baja de los que te destrozan las piernas…a largo plazo. Con buen ritmo vamos subiendo dándonos relevos entre Axel y yo. Antuán se queda un poco descolgado y empezamos a adelantar a bikers que se las prometían muy felices en las bajadas, pero subiendo no tenían las mismas prestaciones. A poco de coronar, a mano derecha nos encontramos el segundo avituallamiento y decidimos esperar al “tercer mosquetero” para seguir la aventura. Unas fotos de recuerdo, un poco de agua y seguimos nuestro camino.




Antuán nos advierte que va justo de fuerzas y que no le esperemos. Así que empezamos a tirar de nuevo en otro tramo de sube-baja entre senderos y bastante cerrado a lo que a vegetación se refiere. Y llegamos al punto, para mí, más bonito y divertido de la jornada. Una bajada 100% senderito, con sus raíces, sus escalones, cerrado y rápido, muy rápido, vamos lo que aquí  llamamos “Enjoy”. Bajé a rueda de Axel y casi me mato, pero valió la pena, porque la adrenalina y las endorfinas hicieron que me sintiera grande por momentos. Pero eso, fueron momentos. La montaña me pondría en mi sitio muy pronto…


En el mundo de la mountain bike, si bajas mucho luego tienes que acordarte que subirás mucho más. Nos encontramos en la cota más baja de toda la marcha. Empezamos la subida más dura  y la trampa que escondía esta “cabronenca”.  Poco a poco me voy descolgando de Axel, que está muy fuerte, a pesar de que está todavía convaleciente de una pequeña intervención. Voy regulando, sé que tengo que trabajar el mental, y vamos subiendo con todo puesto en la bici. En el kilómetro 32 aprox. empiezan unas rampas con un porcentaje muy duro, que se suman a los kilómetros de sube-baja que llevamos en las “patas”. Solo hay que ver el perfil de la altimetría para saber que esta pedalada tiene su dureza, no hay nada plano, son unos dientes de sierra donde o subes o bajas. No hubo calambres, no hubo taquicardia, pero las piernas se pusieron muy duras y tuve que echar pie a tierra. Hice el último tercio de la subida caminando, como otros muchos bikers, en una especie de procesión multicolor.




Una vez arriba pude recuperar las piernas encima de la bici y llegué al último avituallamiento del día. Pude saludar a un antiguo compañero de trabajo (es rara la pedalada donde no me encuentre a alguien) que no veía desde hace más de 6 años!!! Cuando me disponía a partir, llegó Antuán, así que esperé que se recuperara para afrontar juntos el último tramo y llegar a meta. Empezamos una corta y divertida bajada “corriolera” y nos disponemos a atacar la última subida. Tenia claro que si era tan dura como la anterior igual me obligaría a descabalgar, pero por suerte fue más asequible, aunque me llevé otro susto. Me entró una rampa que me hizo temer lo peor, la llegada de sus primos los calambres. Pero después de estirar un poco pude retomar el camino con normalidad, subiendo con prudencia y a ritmo.




Corono en solitario (Antuán se quedó un poco retrasado en la subida, pero entramos casi juntos en meta) y me dispongo a disfrutar de la bajada, ancha, solitaria, a través de una pista que llevaba al pueblo. Se acabaron los preciosos senderitos y el sol ilumina nuestras cabezas, que habían permanecido ocultas por los arbustos del camino. La policía local nos da la bienvenida, llegamos a una zona delimitada por cintas y vallas que nos lleva a línea de meta. Objetivo cumplido!!!  Ya solo quedó ir a devolver el chip de cronometraje y recoger nuestro maillot de recuerdo. Por cierto, de mucha calidad y que este año homenajeaba al equipo nacional de rugby de Nueva Zelanda, los “ALL BLACKS” campeones mundiales en 2011.



Como anécdota, decir que me encontré con un pelotón de la vieja guardia espartana, los famosos “platicos” aliados de los Martorell Bikes y comandados por el gran Truji.  Lo de gran no es un adjetivo para resaltar lo buen biker que es, sino por su estatura y envergadura (véase la foto ilustrativa al respecto).





El punto negativo fue que unos incívicos (por decirlo de forma suave) quitaron las cintas de marcaje y algunos bikers se perdieron en el recorrido largo. Un boicot en toda regla, ajeno a la organización pero que empañó esta edición. Para otro año se debería pensar en un doble marcaje, con cintas y con cal en el suelo.


Una gran marcha, muy bien organizada, dura, con buenos obsequios y atención a los ciclistas. Recomendable para aquellos a los que les gusten los senderos. El único inconveniente es su precio (26 euros)  pero hay que destacar que los avituallamientos son muy completos, la butifarrada  y que el “obsequio” es un maillot con un diseño espectacular y confeccionado con buen tejido. Creo que se merece un rincón en mi recuerdo y en mi agenda. El año que viene, a poco que pueda, repetiré.


 
Resumen de la marcha:



40 Km con un desnivel positivo acumulado de 1.500 metros.
Tiempo invertido 4:01:15 a una media de 10,1 km/h (Tiempo total 4:46:03)
FC media 161 ppm  y FC máxima  189 ppm   Cadencia media  86 ppm

Website Organización Pedalada de Cabrils "La Cabrilenca"

Track Cabrilenca 2012 by Luichi

P.D. Ya tengo casi terminada la crónica de la Maratón de Los Monegros. La tendré que colgar en 2 partes, por lo extenso del texto. Hasta pronto!!!





Agradecimientos: Este video es propiedad del usuario de Youtube miquelvs

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